Vió Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: "Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño". Le dice Natanael: "¿De qué me conoces?" Le respondió Jesús: "Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi". Le respondió Natanael: "Rabbí, tu eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel. Jesús le contestó: "¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera crees? Has de ver cosas mayores". Y le añadió: 'En verdad os digo: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del Hombre.
Palabra del Señor.
A lo largo de la historia de la Iglesia se ha puesto a los hombres y pueblos bajo el patrocinio de la Virgen María, de los ángeles o de los santos. Nuestro pueblo de Cabo Rojo tiene el honor de estar bajo la protección de San Miguel Arcángel.
Un arcángel es una criatura de Dios que tiene como función dar a conocer a los hombres grandes noticias, mensajes de gran valor. San Miguel nos trae el mensaje: el hombre ha de estar con Dios y reconocer Su grandeza. Dios es Todopoderoso y no hay nada ni nadie superior a Él. Por eso, ante el enemigo que quiere apartarnos del camino y del amor de Dios, Miguel nos dice: ¿Quién como Dios?
San Miguel Arcángel no solo muestra el camino sino que es un gran aliado del hombre en la lucha contra las tentaciones y asechanzas del mal. Como pueblo somos agraciados pues nuestro defensor es San Miguel. Hay que invocar su protección, ponerse bajo su patrocinio. Ante los retos y dificultades de la vida y sobre todo ante el reto de poner por obra la Palabra de Dios en nuestra vida quién como San Miguel Arcángel para ayudarnos, para defendernos del demonio.
La Iglesia nos ha dado un protector, está de nosotros hacer uso de si intercesión. Invoquemos su protección, acudamos a buscar su ayuda. ¡San Miguel Arcángel protégenos y protege a Cabo Rojo!
Las Fiestas Patronales de San Miguel Arcángel de Cabo Rojo
Autor: P. Germán Lombó Rodríguez O.S.A
Mensaje del Párroco en Anuario Fiestas Patronales 1982
...San Miguel es un nombre derivado de una palabra de origen hebreo que significa: ¿Quién como Dios? Se considera en la literatura bíblica a San Miguel como Príncipe de los Ángeles y así fue venerado en el transcurso de la historia de la Iglesia. Son cuatro las citas bíblicas en donde aparece el nombre de nuestro patrono.
Según el profeta visionario Daniel, es Miguel Arcángel el "Ángel Tutelar" de la familia del pueblo de Dios: los judíos o israelitas. Era una creencia de la fe de ese pueblo que San Miguel protegía a los de la nación judía durante el famoso exilio babilónico (deportación).
En la carta escrita por el apóstol San Judas Tadeo, se le llama Arcángel San Miguel. Según doctrina común en la Iglesia, a San Miguel se le representa en el arte como príncipe que pelea contra el poder de las tinieblas, Luzbel o el Dragón.
...Según la tradición católica, San Miguel es el encargado de conducir a las almas ante el tribunal divino. En las Misas dedicadas a los difuntos, dice el Misal: "Almas llevadas al Paraíso por San Miguel..." Con razón se le conoce en la Iglesia como "Príncipe de las Milicias Celestiales".
Todo el arte cristiano, en pinturas e imágenes, se ha llevado a plasmar la idea concebida durante siglos de que San Miguel "luchó" contra el príncipe de las tinieblas (Luzbel) y "ganó la batalla" para Dios. Así aparece con una lanza destruyendo al dragón infernal, como pueden observar en la imagen que existe en nuestro templo parroquial de Cabo Rojo.
Las Fiestas Patronales nacieron del culto a San Miguel y hacia él deben encauzarse nuevamente; cuando corrientes nuevas, poco cristianas, van minando la fe que debe manifestarse una vez más durante los nueve días o el novenario dedicado a nuestro patrono. Estas fiestas, nuestras Fiestas Patronales, antes que otra cosa, deben ser motivo de reflexión, de oración, de unidad de toda la comunidad cristiana.
...Cada día de nuestras vidas debemos hacer una reflexión de cómo vivimos la fe. La fe nos lleva a ser más espirituales y no tan materialistas; a ser más justos con nuestros hermanos a quienes debemos tratar como quisiéramos que nos trataran a nosotros. Más amantes y constructores de la paz con nosotros mismos, con nuestra familia en la comunidad donde desarrollamos nuestras vidas.
...El apostol Pablo nos da un alerta: "No caigan en la falta de ser como veletas que mueve el viento en todas direcciones, llevados a la deriva y zarandeados por cualquier viento de doctrina". (Efesios 4,14)